Apesar de que es posible realizar una amplia variedad de transferencias, es importante tener en cuenta que existe un límite máximo, más allá del cual es necesario justificar el origen de los fondos tanto ante la entidad bancaria como ante la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP).
En la actualidad, existe un límite para realizar transacciones formales sin necesidad de declarar su origen, que se sitúa en $200.000 por mes. Aunque hay casos en los que muchas personas realizan transacciones que superan este límite sin ser requeridos para justificar su origen, es fundamental destacar que a partir de esa cantidad, aumenta la probabilidad de que se solicite una declaración sobre el origen de los fondos.
AFIP: qué pasa si no justificás la plata de una transferencia
Si el monto total acumulado de los depósitos a plazo constituidos en el período mensual es igual o superior a $200.000 las entidades financieras deberán informarle a la AFIP.
En caso de que recibas una transferencia de dinero elevada, siempre y cuando esté debidamente justificada, como por ejemplo, la venta legítima de una propiedad, servicios facturados a un cliente o la venta de un vehículo, no deberías enfrentar problemas. En algunas ocasiones, el banco podría retener los fondos de manera preventiva, pero una vez que presentes la documentación que respalde la operación, podrás liberar el dinero sin inconvenientes.
Ahora bien, hay situaciones en las que el monto recibido por transferencia no está completamente "justificado", como en el caso de una venta informal de un dispositivo electrónico de alto valor, por ejemplo, una computadora por un importe de 300 mil pesos. En estos casos, hay algunos riesgos que conviene considerar.
Si sos monotributista, por ejemplo, pueden sospechar de evasión fiscal y la AFIP puede accionar de diversas maneras, desde aplicarte sanciones y/o multas, hasta perder la condición de monotributista si excedés los límites del monotributo debido a esa transferencia.
En caso de que no estés registrado, el banco puede retener o rechazar la transferencia y solicitarte que justifiques los fondos. En caso contrario, podrían cerrarte la cuenta y elaborar un Reporte de Operación Sospechosa (ROS) ante la Unidad de Información Financiera (UIF).
¿Cuánto puedo recibir por transferencia sin declarar en 2023?
En la actualidad, la inflación ha alcanzado niveles significativos, lo que ha llevado a la AFIP a actualizar los montos que los bancos y entidades financieras deben informar. Anteriormente, este umbral era de $90.000, pero se ha incrementado a $200.000. A partir de esta cifra, comienza a existir la posibilidad de verse obligado a declarar la procedencia del dinero.
El monto anunciado por el ente recaudador contempla la suma total de todas las operaciones realizadas por una persona durante un mes calendario. Esto incluye no solo los depósitos y transferencias recibidas en las cuentas bancarias, sino también los saldos en depósitos a plazo fijo, cuentas de inversión y cualquier otra operación realizada en el sistema financiero en general.
Por ejemplo, si en una billetera virtual se realizaron transferencias por un total de $160.000 y, además, se efectuaron transferencias por $60.000 en un banco, la suma de ambas operaciones alcanza los $220.000. Esto supera el límite mensual permitido de $200.000 y podrías quedar expuesto.
En el caso de que la entidad financiera considere necesario solicitar una justificación de los fondos, se comunicarán a través de correo electrónico o mediante una notificación en la aplicación, solicitándote la documentación respaldatoria que justifique dichos movimientos.
En este sentido es importante tener presente estas regulaciones y estar preparado para proporcionar la documentación necesaria en caso de ser requerida.
Si bien existen casos en los que las personas realizan transferencias o reciben montos superiores a los establecidos sin que se les soliciten justificativos, es importante tener en cuenta que a partir del umbral de $200.000, se aumenta la posibilidad de que se requiera información adicional sobre el origen de los fondos, por lo que por sumas cercanas a $500.000 la probabilidad de que soliciten documentación es muy elevada.
¿Cuándo investiga AFIP a los usuarios?
Cuando AFIP detecta inconsistencias entre las declaraciones juradas de los contribuyentes y su situación fiscal real (o declarada), se inicia una investigación. En caso de que estas discrepancias sean significativas y justifiquen la intervención de la AFIP, se llevará a cabo un operativo exhaustivo, seguida de una intimación.
Un ejemplo de estas inconsistencias puede darse en el caso de un monotributista que presenta gastos elevados en su tarjeta de crédito, los cuales exceden los límites establecidos para su categoría en el régimen del monotributo. Ante esta situación, la AFIP podría intimarlo a recategorizarse o incluso pasarlo directamente al Régimen General, sin descartar la posibilidad de aplicarle multas, entre otras sanciones.