El Gobierno no convalidará los aumentos anunciados por las empresas de medicina prepaga, que comenzarían a regir desde el 1º de enero.
Según trascendió, el 15% que pretenden las privadas se contrapone con el esquema escalonado previsto por el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno.
De acuerdo al plan gubernamental, el incremento anual no debería superar el 7% para productos o servicios básicos; el 14% para el segmento selectivo, y el 18% para la categoría premium, destaca el diario BAE en su edición de hoy.
En tanto, desde la Cámara de Instituciones Médico-Asistenciales de la Argentina (Cimara) indicaron al matutino que "más allá de la postura que esgrima Moreno, tal como ocurrió este año, nosotros vamos a incrementar las cuotas un 15% porque tenemos que soportar el aumento de los costos, por una paritaria que llevó a un 32% de aumento salarial".
Ya en estos días y en los primeros días de enero, las boletas de las firmas nucleadas en Cimara llegan con una suba del orden del 15%, aunque en particular, el Centro de Educación Médica e Investigaciones Clínicas (CEMIC) aplicó una suba de 10 por ciento.
Alzas justificadas
Hace unos meses, el gremio de la sanidad acordó con las prepagas un aumento salarial de 32% pero con la condición de implementarlo en dos etapas.
El primer incremento (20%) se dio con el sueldo de agosto mientras que el 12% restante fue cobrado con el salario de diciembre.
Tal como viene sucediendo hace un par de años, las empresas del sector trasladaron las subas a la cuota mensual que pagan sus afiliados y por eso ya vienen con incrementos de 15 por ciento.