La Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) promoverá la operaciones con tarjeta de débito en todos los comercios del país, en cumplimiento de la ley que prevé el uso de ese medio para todas las compras en ciudades de más de mil habitantes
Así lo anunció este martes el titular de la AFIP, Alberto Abad, quien destacó que el organismo promoverá el uso de la tarjeta de débito “de manera progresiva, comenzando primero por los comercios de mayor volumen, por los lugares que tienen mayor conectividad, y por los sectores con mayor grado de informalidad”.
El funcionario destacó que la ley que obliga a la utilización de la tarjeta de débito, sancionada en el 2001, “esta vigente, pero está en desuso” y que abarca a todas las poblaciones con más de mil habitantes y por operaciones mayores a los 10 pesos.
La utilización de la tarjeta de débito se actualizó, luego de que entrara el lunes en vigencia la Ley que establece la devolución del IVA para jubilados y beneficiarios de planes sociales que realicen sus compras a través de este medio, hasta un tope de 300 pesos mensuales.
“Ahora hemos sacado todos los impedimentos que tenían los comerciantes para utilizar este medio”, dijo Abad.
De esta manera, el funcionario se refirió a las facilidades con que cuentan ahora los negocios para utilizar este medio, entre las que se encuentran computar como crédito fiscal el 50% del costo de mantenimiento para los comercios que ya cuentas con el postnet.
Además, prevé dejar gratis por dos años la compra de postnet para las nuevas altas de establecimientos monotributistas o micro empresas, con ingresos anuales menores a 9 millones de pesos. El sistema no cobrará aranceles por esta gestión a los comercios monotributistas.
Abad destacó que esta mayor utilización de la tarjeta de débito “no se hará de la noche a la mañana” y que se irá "trabajando gradualmente para extenderla a todos los comercios".
La no utilización de la tarjeta de débito de parte de los comercios puede acarrear suspensiones, e inclusos clausuras, según detalla la Ley sancionada en el 2001.
Abad recordó que “no puede haber precios diferentes” para un mismo producto o servicios, ya sea que se pague en efectivo, o con cualquier tipo de tarjeta.
“Tenemos que ir, progresivamente, terminando con estos comportamientos”, concluyó Abad.