A poco de iniciada la reunión a la que asistieron representantes del empresariado y los gremios, además de funcionarios nacionales, el Ministerio de Trabajo informó en un comunicado que subió en un 33% el Salario Mínimo, Vital y Móvil,. Así, a partir de enero de 2017, el número será de $8.060.
De acuerdo al detalle, el monto se entregará en tres tramos: $6.810 a partir del 1º de junio, $7.560 en septiembre y $8.060 en enero.
Respecto del nivel de fines de diciembre, el aumento del salario mínimo vital y móvil es de 44 por ciento. Asimismo, el nuevo tope salarial para acceder a la tarifa social se eleva a $16.000.
Las comisiones que se reunieron desde horas de la mañana en la sede central de la cartera laboral, en la avenida Leandro N. Alem 650 del centro porteño, fueron las del Consejo Nacional del Empleo; Productividad, Formación Profesional y Salario Mínimo, Vital y Móvil, y Prestaciones por Desempleo.
Este cuerpo tripartito está constituido, entre otros, por el jefe de Gabinete de la cartera laboral Ernesto Leguizamón, el secretario general de UPCN, Andrés Rodríguez, su par de la Unión Ferroviaria, Sergio Sasia, y en representación de la Unión Industrial Argentina (UIA) Daniel Funes de Rioja.
En tanto, la Comisión de Productividad fijó una agenda de trabajo centralizada en las temáticas de seguridad y salud en el trabajo, calidad de las condiciones laborales, adicciones en el mundo del trabajo, cambio tecnológico, problemática de la tercerización, relación entre impuestos y productividad y ausentismo.
La reunión fue encabezada por el secretario nacional de Empleo Ezequiel Sabor y es secundado por el titular del gremio de obras sanitarias José Luis Lingeri y sus pares Omar Plaini (canillitas) y Roberto Fernández (UTA) y por la UIA Darío Hermida y Javier Balestra.
Estuvieron presentes Pablo Micheli y Hugo Yasky y llamó la atención la ausencia del jefe cegetista Hugo Moyano. Sí participó el secretario general de la Unión de Empleados Judiciales de la Nación, el moyanista Julio Piumato.
El Gobierno envió el miércoles una señal de firmeza a las centrales obreras. Fue durante un desayuno con empresarios en el que el ministro de Trabajo, Jorge Triaca, cuestionó a la vieja guardia y volvió a rechazar la ley antidespidos. "Cuando veo que los dirigentes sindicales son los mismos que cuando estaba mi viejo, me planteo más que nunca que algo hay que hacer", señaló, y pidió "una modernización sindical".
Por las diferencias internas, los representantes gremiales tenían previsto acercar posiciones en la previa a las comisiones de trabajo referidas a la actualización del SMVM, subsidio al desempleo, productividad, empleo y seguridad social. "Lo vamos a terminar de definir en el pasillo, mientras esperamos que se constituyan las comisiones", explicó Hugo Yasky a iProfesional.
En su último informe, el Observatorio de la CTA michelista alerta que el mínimo se encuentra, en términos reales, en su nivel más bajo desde 2006. Esto se debe a que su actualización no alcanzó a compensar la suba de precios. Por el contrario, indica el centro de estudios, la caída fue del 4,4% en el primer cuatrimestre del 2016, respecto del mismo período del año pasado.
Según el estudio, la tendencia a la baja se inició en 2012, durante el gobierno de Cristina Kirchner. Y, como consecuencia, su función no habría sido la satisfacer las necesidades básicas fijadas por el artículo 14 bis de la Constitución Nacional. "A lo largo de los últimos cuatro años el SMVM se convirtió en una herramienta de contención salarial, muy lejos del papel de impulso de los básicos convencionales que debería cumplir", advirtió el observatorio.
En efecto, el salario mínimo vigente es menos de la mitad de la canasta básica que mide el gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. En abril, una familia tipo porteña necesitó $14.770 para no considerarse pobre y acceder a bienes y servicios indispensables. Su valor aumentó 37,91% en los últimos doce meses, según informó este miércoles la Dirección General de Estadística y Censos de la Ciudad.