Con la mira puesta en potenciar las inspecciones, el Gobierno porteño busca avanzar sobre el domicilio de los "presuntos evasores".
De acuerdo al texto del proyecto de Código Fiscal 2012, que ya ingresó a la Legislatura local, el jefe de Gobierno, Mauricio Macri, propone que la Administración Gubernamental de Ingresos Públicos (AGIP) pueda determinar cuál es el lugar de residencia de las empresas o particulares que estén bajo la mira. Para acceder al texto completo de la iniciativa oportunamente adelantada por este medio haga clic aquí.
El Ejecutivo porteño propone que cuando se compruebe que el domicilio declarado por el contribuyente es inexistente, la AGIP podrá -a través de resolución fundada- declarar como domicilio fiscal aquél que surja en base a datos concretos, recolectados conforme a sus facultades de verificación y fiscalización.
Para que la avanzada sea válida, la AGIP deberá constituir el nuevo domicilio de la empresa o particular de forma clara y precisa, indicando "calle y número, agregando piso, número o letra del inmueble, cuando correspondiere".
Conocida la propuesta, Alberto Romero, consultor impositivo y previsional, aseguró que "el fisco porteño busca acabar con una nociva práctica por la cual los evasores pretenden escapar de las autoridades fiscales declarando un lugar inexistente".
Romero adelantó que una vez aprobada la popuesta, "la AGIP tendrá en su poder una nueva arma que le permitirá avanzar sobre los evasores y -sobre todas las cosas- direccionar las inspecciones hacia el lugar que decidieron ocultar".
Inspectores encubiertos
Por otra parte, de acuerdo al texto de los proyectos de Código Fiscal y de la Ley Tarifaria 2012 la AGIP también busca imponer la figura del "agente fedatario" como una nueva arma para combatir la evasión.
En efecto, el texto del nuevo artículo propuesto solicita "autorizar a los funcionarios a que actúen como compradores de bienes o servicios y constaten el cumplimiento por parte de los vendedores, de la obligación de emitir y entregar facturas y comprobantes".
Además, aclara que el accionar de los "agentes encubiertos" deberá "estar fundado en los antecedentes fiscales o en denuncias concretas que hagan presumir la existencia de indicios de la falta de entrega de comprobantes por parte de los vendedores".
Dado que la normativa vigente sobre emisión de facturas es confeccionada por la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), se interpreta que el ejercicio de las nuevas funciones de "agentes fedatarios" por parte de los funcionarios del fisco porteño posibilitará compartir la siguiente información entre ambos organismos de recaudación:
- Las denuncias recibidas por la "no emisión de facturas", las cuales son realizadas por los consumidores finales a través de la línea gratuita 0800 y de la página web.
- La información sobre las "bases imponibles" del Impuesto al Valor Agregado y del Impuesto sobre los Ingresos Brutos de los contribuyentes, o bien, del carácter de "monotributistas" de los mismos.
- Los datos sobre los sujetos "excluidos" del Monotributo, por haber constatado que tales contribuyentes han superado los parámetros de ventas.
- La información sobre "depósitos en efectivo" en las cuentas bancarias de los proveedores de los comerciantes minoristas, lo cual constituye un claro indicador de la magnitud de las "ventas en negro" en la etapa minorista.
Alquileres y ABL en la mira
Asimismo, la iniciativa elevada a la Legislatura local también contempla la utilización de los alquileres a fin de constatar el monto de los pagos en Ingresos Brutos.
Puntualmente, el texto propuesto incorpora una nueva presunción a la hora de determinar el peso del tributo: "El ingreso bruto de un período fiscal se presume que no podrá ser inferior a tres veces el alquiler que pague el contribuyente, o el que se comprometieran a pagar, el que fuera mayor".
"Cuando los importes locativos de los inmuebles que figuren en los instrumentos sean notoriamente inferiores a los vigentes en plaza, o cuando no figure valor locativo alguno, y ello no sea explicado satisfactoriamente por los interesados, la AGIP podrá impugnar dichos precios y fijar de oficio un precio razonable de mercado", agrega la iniciativa.
Por último, el proyecto de Código Fiscal 2012 explica cómo aumentará el ABL porteño. En primer término, la iniciativa establece que el 31 de julio de cada año la AGIP enviará el listado actualizado de los valores de las propiedades, que servirá de base para calcular el monto del impuesto a ingresar al año siguiente.
La Legislatura contará con 30 días corridos para efectuar las observaciones que considere adecuadas. Los valores también serán publicados en la web de la AGIP.
Asimismo, la propuesta contempla que el pago pase a ser mensual (actualmente es bimestral) y que tenga un piso de $50 al mes. También se propone aumentar de 10% a 20%, el descuento por pago adelantado.
Si bien seguirá llegando una sola boleta, se comenzarán a facturar por separado dos componentes:
- La tasa por el servicio de alumbrado, barrido y limpieza, que será igual para todos y bajará de 0,582% a 0,5% de la valuación que determina el fisco.
- El impuesto inmobiliario, que contemplará alícuotas crecientes a medida que se trate de propiedades de mayor valor. Actualmente la tasa va de 0,4% a 0,7% y pasará a una alícuota que oscilará entre 0,2% y 1,5 por ciento.
A su vez, la iniciativa prevé implementar la Valuación Fiscal Homogénea (VFH) que luego se multiplicará por 4 para así obtener el monto que estará sujeto a la alícuota del impuesto a fin de obtener el tributo a ingresar.
Por otra parte, este valor nunca podrá ser mayor al 20% del valor de mercado.
La VFH se ajustará -año tras año- según la evolución o involución del mercado, sobre fuentes profesionales, fidedignas y reconocidas.
A modo de límite, el proyecto precisa que "ninguna propiedad podrá pagar anualmente más del 1% de su valor real de mercado". (Lea más: Claves para entender cómo se ajustará el ABL y cuál será su impacto en el bolsillo de los porteños)